Netflix defiende bromas «anti-trans» de Dave Chappelle y Ricky Gervais
La semana pasada, Netflix salió en defensa de los comediantes Dave Chappelle y Ricky Gervais, cuyos últimos monólogos han sido motivo de controversia. Varios detractores alegan que los chistes presentes en aquellos especiales de stand up suponen un ataque a las personas transgénero. Sin embargo, la «N» roja no sólo rechaza esa opinión, sino que además encuentra importante estar a favor de semejantes manifestaciones humorísticas. Desde la perspectiva del codirector ejecutivo de la compañía, Ted Sarandos, son resultado de una libertad de expresión que debe defenderse a toda costa.
El año pasado, hubo fuertes críticas hacia Netflix por abrigar el especial de stand up The Closer, donde el comediante Dave Chappelle bromeó sobre las personas transgénero. Incluso hubo empleados de la «N» roja que protestaron afuera de la sede de la compañía en Los Ángeles. Pero Sarandos, aunque sorprendido por tales reacciones, no ha dejado de respaldar los monólogos de Chappelle. De hecho, opina que los comediantes deben «cruzar la línea de vez en cuando» para conocer sus límites ante lo políticamente correcto.
«Creo que es muy importante para la cultura estadounidense en general tener libertad de expresión», declaró el ejecutivo en reciente entrevista con The New York Times. «Hacemos programación para mucha gente diversa que tiene opiniones diferentes, gustos diferentes y estilos diferente. Y sin embargo, no estamos haciendo todo para todos. Queremos algo para todos, pero no todo va a ser para todos».
Y agregó:
«[Apoyar a Chappelle] no fue difícil en ese sentido. Y rara vez tienes la oportunidad de poner a prueba tus principios […] Él es, en todos los sentidos, el comediante de nuestra generación, el comediante más popular en Netflix con seguridad. Nadie diría que lo que hace no es reflexivo o inteligente. Simplemente no estás de acuerdo con él».
La semana pasada, llegó a Netflix otro especial de stand up que desencadenó polémica. En este caso se trataba de SuperNature del británico Ricky Gervais, cuyas bromas fueron tildadas de «anti-trans» por algunos detractores. Al respecto, Ted Sarandos aseveró que Gervais presumía del mismo apoyo que la «N» roja brindaba a Chappelle. Y ligado a semejante postura, fue que este mes la compañía envió un memo a sus trabajadores donde el CEO sentenciaba lo siguiente: «Si te resulta difícil respaldar la amplitud de nuestro contenido, es posible que Netflix no sea el mejor lugar para ti» (vía).
Un medio conservador de Estados Unidos, The Daily Caller, celebró aquel dictamen de Sarandos, al interpretarlo como una «advertencia» hacia los empleados «woke» inconformes con los contenidos controversiales de la plataforma.
«Solía ser un tema muy liberal, por lo que es un momento interesante en el que vivimos», comentó el mandamás de Netflix a The New York Times, acerca de recibir la aprobación de los simpatizantes de derecha. «Siempre dije que si censuramos en los EEUU, ¿cómo vamos a defender nuestro contenido en el Medio Oriente?»
De forma casi irónica, una de los contenidos más populares de Netflix en días recientes es una serie aplaudida por su representación de la comunidad LGBT. Se trata de Heartstopper, basada en la homónima novela gráfica, que cuenta la historia de amor homosexual entre dos estudiantes de preparatoria. Apenas la semana pasada, el streamer renovó el show británico para una segunda y tercera temporada.
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