David Cronenberg quiere provocar con su última película, Crimes of the Future, y, viendo las reacciones a su proyección en el Festival de Cine de Cannes, se esperan salidas masivas de los cines cuando se estrene. Se está posicionando desde ya como la película más escandalosa del certamen y el propio Cronenberg predice que los espectadores huirán de la sala tras ver los primeros cinco minutos. El cineasta vuelve al terror corporal tras sus primeros trabajos, como Videodrome, pero nada es comparable a su último proyecto.
¿De qué trata Crimes of the Future? En un futuro distópico, la humanidad se ha adaptado a un entorno sintético que les lleva a sufrir alteraciones en el organismo. Una evolución en la biología que provoca una brecha en la sociedad: los que se dejan llevar por su potencial ilimitado y los que tienen miedo de las consecuencias. Saul Tenser es un artista que abraza el cambio y genera nuevos órganos en su cuerpo. Junto a su compañera Caprice convierte la extracción de esos órganos en un espectáculo.
Ya en el tráiler se aprecia que no es para los estómagos más sensibles. Hay cuerpos cortados, maltratados, una cara con la boca y los ojos cosidos, orejas saliendo de la parte superior de la cabeza. El material promocional no engaña y avisa de que se avecinan escenas violentas, pero lo que los asistentes al pase se han encontrado traspasa cualquier límite. Para Alejandro G. Calvo, crítico y ‘publisher’ de SensaCine, Crimes of the Future ha roto Cannes -y, de paso, su salud mental-.
Aquí todo es deliciosamente gutural, un horror gráfico que, sin embargo, Cronenberg encuadra como si estuviera realizando un film erótico. La imagen es grotesca, llegando a lo insoportable, cada nueva performance es más hardcore que la anterior; tampoco deja de crecer el romanticismo, la sensualidad -cuando Kristen Stewart besa, besa de verdad-, la lascivia que mientras grita ‘la cirugía es el nuevo sexo’ está pensando ‘quiero que me chupes el páncreas’
David Cronenberg dijo a Deadline que Crimes of the Future atraerá o repelerá al público, pero no es su intención hacer películas que impacten o ataquen al público. Simplemente muestra cosas que nota e ideas y sueños que ha tenido, dejando la interpretación a los espectadores.
“Hay algunas escenas muy violentas. Estoy seguro de que la gente abandonará la sala en los primeros cinco minutos de la película”, ha contado Cronenberg a Deadline. Y no han tardado en salir los primeros casos de gente del público pasándolo mal. Se comenta que un hombre casi tuvo un ataque de pánico y hay una opinión casi unánime de que los últimos 20 minutos son demasiado violentos para la audiencia. Para el director, sin embargo, nada es tan exagerado y dice que salirse de un cine en Cannes también es algo especial. Él, que en 1996 estrenó Crash en ese mismo certamen, tuvo que soportar abucheos por parte del público y mucha indignación.
Crash perturbó al público con su representación de sexo y violencia a través de la historia de una pareja que encuentra un nuevo placer en el dolor y la destrucción después de un accidente automovilístico. Cronenberg asegura que en Crimes of the Future no hay sexo, a menos que se consideren las cirugías como “el nuevo sexo”.
Protagonizada por Viggo Mortensen, Léa Seydoux y Kristen Stewart, Crimes of the Future todavía no tiene fecha de estreno.
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