Desde la primera secuencia se percibe que The Vast of Night es una película muy especial. La cámara se mueve lentamente hacia una habitación en calma. Se percibe que es de otra época, al menos es lo que quiere decir el pequeño cubículo que hay por televisor. Está a punto de comenzar un episodio de una serie de misterio y los espectadores pronto se ven sumergidos en ella. Es una de las cintas más destacables de la ciencia ficción de los últimos años y está disponible en Prime Video.
La ópera prima de Andrew Patterson comienza con esta curiosa introducción que alude claramente a la serie de culto La dimensión desconocida. Toda su ambientación recuerda a ella. Los hechos transcurren en Nuevo México durante 1958 y rápidamente evoca el estado de ánimo y las expectativas que los espectadores esperan de un filme así. Un año antes, en octubre de 1957, la conmoción del Sputnik sacudió a Estados Unidos, ya que la Unión Soviética había puesto en órbita el primer satélite artificial. Además, en Nuevo México está Roswell, el pueblo donde un OVNI se estrelló en 1947.
Pero, ¿de qué va The Vast of Night? Los protagonistas son Everett Sloan (Jake Horowitz) y Fay Crocker (Sierra McCormick), dos adolescentes de un pequeño pueblo. Él trabaja en la radio local y ella en la compañía telefónica. Durante una noche, casi en tiempo real, acompañamos a los dos personajes mientras descubren una curiosa historia que les mantendrá alerta.
Fay escucha una extraña señal que interfiere con la retransmisión de radio, lo que le llama la atención. Poco después, una mujer llama pidiendo ayuda porque ha visto unas luces misteriosas en su pasto. Fay y Everett están tratando de averiguar qué está pasando cuando un hombre llama al programa dispuesto a desvelar importantes secretos del gobierno.
Desde luego, The Vast of Night no cuenta nada que no se haya tratado ya antes. Lo especial de esta cinta no recae en su trama, sino en el modo de contarlo. El director crea una interesante pieza en la que mezcla estilos cinematográficos diferentes, desde un travelling en el que acompañamos al protagonista preparándose para la noche hasta tomas de programas de televisión o planos fijos y fundidos a negro para que tu atención recaiga únicamente en lo que están contando.
La segunda parte de la película transcurre en un espacio muy pequeño, con muy pocos personajes. Es casi una obra de teatro en la que lo importante es qué se dice en las conversaciones. ¿Imaginas la sensación de ser un niño y estar escuchando a un adulto contar un cuento fascinante? Eso es justo lo que transmite la película. Y lo hace en un ambiente muy bien trabajado para transmitir un mensaje preciso.
El ‘boom’ retro de ‘Stranger Things’ al cuadrado
Parte del éxito de Stranger Things son las referencias de los 80 que ha puesto de moda. Esos peinados cardados y chaquetas flúor no han pasado desapercibidas, pero, a pesar de la importancia de estos detalles, la historia que cuenta la serie de Netflix podría haberse desarrollado en cualquier otra época. The Vast of Night no. La cinta apela directamente a la nostalgia por la década de los 50, las series que se consumían entonces y ese espíritu de esperanza por lo que está por venir. Andrew Patterson evoca la nostalgia de una época en la que uno no tenía que ser nostálgico sino que podía creer en un futuro.
The Vast of Night está disponible en Prime Video.
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