‘El chico y la garza’ – Hayao Vs. Miyazaki

Aprecio y respeto las incuestionables bondades del cine de un Hayao Miyazaki al que respeto más que admiro, pero este su nuevo (pen)último filme está marcado por una excesiva autoindulgencia. ‘El chico y la garza’ recuerda además en exceso a otras obras anteriores suyas, siendo que su presencia en pantalla no es lo suficientemente fuerte como para imponerse al recuerdo de algunos de sus grandes clásicos.
El maestro japonés se deja arrastrar, o más bien arrollar por su habitual ímpetu fantasioso, recreándose con júbilo casi infantil en una estética por momentos muy poderosa que no obstante se ve resquebrajada por una narrativa y una lógica interna demasiado inconsistentes y volátiles. Es como si en cierto sentido, a su edad prevaleciera el chaval que se resiste a crecer al cineasta que se resiste a morir.
‘El chico y la garza’ es, por decirlo de alguna manera, una preciosidad inestable cuyo desordenado y críptico entusiasmo nos complica formar parte de una experiencia que se siente extracorporal. Es admirable que Miyazaki siga siendo en esencia un chaval, pero durante esta película uno echa de menos la experiencia del cineasta que sabe cómo canalizar ese ímpetu en algo más equilibrado, eficiente y resultón.
Por Juan Pairet Iglesias
@Wanchopex
No hay comentarios